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Cómo conducir en condiciones de baja visibilidad: claves para hacerlo con seguridad
La visibilidad es uno de los factores más importantes al volante. Ya sea por niebla, lluvia intensa, nieve, humo o simplemente por la oscuridad de la noche, conducir con baja visibilidad supone un riesgo real que requiere máxima atención y preparación.
En este artículo te explicamos cómo conducir en condiciones de baja visibilidad, qué medidas debes tomar antes y durante el trayecto, qué errores evitar y cómo mantener tu coche en condiciones óptimas para garantizar la máxima seguridad.
¿Qué se considera baja visibilidad al conducir?
Se habla de baja visibilidad cuando el conductor no puede ver con claridad lo que ocurre delante o alrededor del vehículo, generalmente por debajo de los 100 metros de alcance visual. Esto puede deberse a varios factores:
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Niebla espesa o niebla matinal
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Lluvia intensa o tormentas
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Nieve o ventisca
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Humo, polvo o arena en suspensión
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Conducción nocturna sin iluminación adecuada
En estas condiciones, el riesgo de accidente aumenta considerablemente, por lo que es fundamental saber cómo actuar correctamente.
Antes de salir: cómo preparar tu coche
La seguridad empieza incluso antes de poner el coche en marcha. Si prevés un trayecto con baja visibilidad, asegúrate de que tu vehículo está en perfecto estado de visibilidad y señalización.
Revisa especialmente:
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El estado y regulación de los faros delanteros, traseros y antinieblas
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El correcto funcionamiento de los limpiaparabrisas y el nivel de líquido del limpiaparabrisas
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El estado del parabrisas y lunetas (sin manchas ni empañamiento)
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Presión y dibujo de los neumáticos para asegurar agarre
Además, es recomendable llevar siempre en el coche una gamuza limpia, un rascador de hielo (en invierno) y un espray desempañante si circulas por zonas frías o húmedas.
Durante la conducción: cómo actuar con visibilidad reducida
Conducir con baja visibilidad exige reducir la velocidad, aumentar la distancia de seguridad y estar especialmente atento al entorno.
Consejos clave:
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Reduce la velocidad y adapta tu ritmo a lo que ves, no al límite de la vía.
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Aumenta la distancia con el vehículo que va delante.
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Evita frenazos o maniobras bruscas. Sé predecible.
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Usa las luces adecuadas: cortas, antiniebla si es necesario, pero evita las largas con niebla porque provocan efecto rebote.
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Enciende las luces de cruce siempre, incluso de día, si hay niebla, lluvia o penumbra.
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No uses luces de emergencia salvo en caso de detención por avería o accidente.
En caso de niebla muy densa, sigue las marcas viales del lado derecho y no te fijes únicamente en las luces traseras del coche que va delante, ya que puedes acercarte demasiado sin darte cuenta.
Qué errores debes evitar al conducir sin visibilidad
Algunos errores muy comunes ponen en riesgo tu seguridad y la de los demás:
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Circular sin luces o con luces de posición solo
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Confiar demasiado en la tecnología del coche (sensor de luz, frenado automático, etc.)
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Usar el móvil o cualquier fuente de distracción visual
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No quitar el vaho del parabrisas por pereza o por no tener el sistema de ventilación bien regulado
Conducir con precaución no es conducir despacio sin más, sino hacerlo de forma anticipada, segura y con plena atención.
¿Qué tipo de coche es mejor para condiciones de baja visibilidad?
Si conduces habitualmente en zonas donde la niebla, lluvia o nieve son frecuentes, puede ser recomendable buscar coches con:
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Faros LED o matriciales adaptativos
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Sensor de lluvia y luces automáticas
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Asistencia de mantenimiento de carril
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Control de crucero adaptativo
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Buen sistema de climatización y desempañado
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❓ Preguntas frecuentes
¿Cuándo debo usar las luces antiniebla?
Las delanteras se pueden usar en caso de niebla, lluvia intensa o nieve. Las traseras, solo si la visibilidad es inferior a 50 metros. Nunca deben usarse de noche si no hay niebla, ya que deslumbran.
¿Las luces largas son útiles con niebla?
No. Al rebotar contra las partículas de agua en suspensión, las luces largas pueden reducir aún más la visibilidad. Lo mejor es usar luces cortas o antiniebla.
¿Qué hacer si no veo nada y no puedo continuar?
Reduce la velocidad de forma progresiva, busca un lugar seguro para detenerte (nunca en el arcén) y enciende las luces de emergencia solo cuando estés parado. Espera a que la situación mejore o solicita ayuda.
¿Con qué frecuencia debo revisar las luces del coche?
Se recomienda revisar el estado y alineación de los faros al menos cada 6 meses, y sustituir bombillas cuando notes pérdida de intensidad. En Romacar ABS lo revisamos por ti.
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